Se busca alcalde

Al levantarse parcialmente el secreto de sumario de Astapa, parece se confirma algo que se sabía, que en Estepona se gobernaba “con faldas y a loco”, o dicho de otra manera, de forma compadre y clientelar, como en tantísimos ayuntamientos de España, no seamos chauvinistas. Pero el meollo de Astapa, el posible enriquecimiento ilícito de políticos y técnicos, la corrupción pura y dura, tardara años en ser juzgado, demasiados años en los que injustamente convivirán en la sospecha justos y pecadores. Para los linchadores su orgasmo no ocurrirá hasta la culpabilidad de sus odiados, pero mientras pueden hacer tocamientos indecentes con las escuchas telefónicas, la prensa y TV Estepona suministran el material erótico.
David Valadez y Cristina Rodríguez, ¿héroes y villanos?. Héroes a su criterio, a tenor por sus autocomplacientes manifestaciones a la prensa. Siendo sutil tengo serias dudas de la falta de villanía. No me parecen éticas las denuncias cuando son falsas y malintencionadas, para hundir a los rivales políticos, ni tampoco me parece ético denunciar por la mañana ante la policía a un compañero por corrupción, y por la tarde votarle como alcalde. Quizás mi ética es muy estrecha, la de Kant, el fin nunca justifica los medios, con seguidores tan elogiados como Gandhi, y opuesta a la ética utilitaria, denostada por algunos por ser la preferida de los sistemas totalitarios.
¿Quién gobernará Estepona partir de este momento?. Valadez no debe seguir de alcalde, tiene muy pocos apoyos dentro del consistorio y demasiados enemigos, el equipo de gobierno no dispone de mayoría, ni con tanto odio creado está en disposición de pedir apoyos. Las denuncias falsas no suelen ser el inicio de una gran amistad. Seguir Valadez de alcalde es un suicidio, no de él en lo político, que ojala, sino sobre todo de un pueblo en la ruina más espantosa cuando en un mes se acumularan los problemas más cruciales, nominas, optar a un préstamo estatal que liquide las deudas municipales, y la elaboración de un plan de saneamiento. Demasiados temas cruciales para un equipo de gobierno en minoría. Pero Valadez tiene una salida airosa, que le permitiría seguir jugando su farsa de político. Si objetivamente no puede gobernar pues, siguiendo su guión, su heroica actitud de denuncia le ha costado el bloqueo por los malvados imputados, que haga lo que correspondería a un político honrado, que fuerce la disolución del consistorio, y que se presenta a unas elecciones anticipadas, y seguro obtendrá el número de votos que su gestión y heroicidad merecen. Más democrático imposible. Y puede presentarse a las próximas elecciones fuera o dentro del PSOE (con los restos que queden), pero de eso hablare otro día. Lo que no es lógico es seguir lloriqueando al PP a que se suba al barco de Valadez. Los del PP son derechas, pero no tontos, con excepciones. Además la política debe intentar ser algo serio, ¿en el mismo barco juntos, para que, cual es el plan, hay plan, naufragar juntos?.
La disolución del consistorio tendría un valor añadido, una Gestora transitoria, que hiciera sin ataduras locales lo que parece son incapaces de hacer nuestro gobernantes, plan de saneamiento, plan de viabilidad, reducción de la plantilla municipal (si es posible sin despidos), reducción de impuestos, y todo en un paquete de medidas bien elaboradas que serian apoyadas los partidos mayoritarios y obtendrían las ayudas económicas requeridas.
Como dice Valadez, Astapa ha levantado la caja de Pandora, y el que lo haya hecho que la pague, y en eso está Astapa, mas sus añadidos, como la querellas por denuncias falsas, o la petición de investigación a los denunciantes pero hasta ahora aun no denunciados.
Pero Astapa tardara años.
¿Mantendrá Valadez la alcaldía hasta la ruina total, o seguirá la secuencia lógica de sus acciones y dejara que decida el pueblo en adelantadas elecciones municipales?. La ética decide los actos, véase los antecedentes.

Damián Zamorano Vázquez
Publicado en Estepona Información el 4.7.2009