jueves, 17 de septiembre de 2009

LAS DUNAS DE EL SALADILLO-MATAS VERDES

NOTAS SOBRE LA VEGETACIÓN PSAMMÓFILA DEL LITORAL MALAGUEÑO. LAS DUNAS… 201

Cuadernos Geográficos, 37 (2005-2), 201-202

* Instituto de Desarrollo Regional. Departamento de Análisis Geográfico Regional y Geografía Física.

Universidad de Granada.

NOTAS SOBRE LA VEGETACIÓN PSAMMÓFILA DEL LITORAL

MALAGUEÑO. LAS DUNAS DE EL SALADILLO-MATAS VERDES

(ESTEPONA)

JOSÉ GÓMEZ ZOTANO*

A lo largo de 3 km de la costa occidental de la provincia de Málaga, en el término municipal de Estepona, se encuentra un valioso complejo dunar denominado El Saladillo-Matas Verdes. Más concretamente, se sitúa entre la Punta de Baños al este y la Punta del Saladillo al oeste. A lo largo de la historia reciente la elevada ocupación urbanística del litoral malagueño en general y de este tramo costero en particular, se ha encargado de eliminar el principal recurso turístico con que cuenta la Costa del Sol, sus playas. Como consecuencia de las intervenciones urbanísticas desarrolladas desde mediados del siglo XX, el complejo dunar de El Saladillo-Matas Verdes se encuentra actualmente fragmentado en tres tramos diferentes y de desigual desarrollo. De este a oeste nos encontramos con las dunas de Matas Verdes o de Casasola que presentan un buen estado de conservación, las dunas de la Playa del Saladillo, desmanteladas en buena parte (sólo quedan las dunas primarias) y las dunas de la Punta del Saladillo que, pese a estar relegadas a una parcela y presentar indicios de degradación, mantienen intacto su potencial ecológico.

No obstante, estas dunas siguen conformando un riquísimo ecosistema de características peculiares, con una vegetación psammófila muy valiosa desde el punto de vista ambiental. En este sentido, es importante resaltar que este desconocido e interesante complejo dunar alberga la única comunidad vegetal típicamente litoral de la costa de Estepona, y una de las pocas existentes en el litoral mediterráneo occidental andaluz, junto con la de Cabopino en Marbella. La gran riqueza biológica de este sistema dunar malagueño radica en su enorme biodiversidad derivada, en parte, de su cercanía al Estrecho de Gibraltar, que le infiere características propias de los sistemas dunares atlánticos (con alcornoques y quejigos) en un medio mediterráneo, lo que lo hace único en la provincia de Málaga y en la cuenca del mar Mediterráneo en general.

Además, este complejo dunar alberga algunas de las escasas dunas estabilizadas y edafizadas que han sobrevivido a la acción conjugada del turismo y la urbanización, conservando todavía los tres niveles dunares y la serie climácica de los sabinares litorales alternando con matorrales de Coremion albi.

La sabina caudada (Juniperus turbinatae subsp. turbinata) aparece como la vegetación clímax sobre estos arenales litorales. Los arenales presentan una zonación en bandas paralelas al mar muy definidas, especialmente en el sector de Matas Verdes, con varios niveles dunares que albergan diferentes tipos de vegetación. Colonizando

202 JOSÉ GÓMEZ ZOTANO

Cuadernos Geográficos, 37 (2005-2), 201-202

las dunas primarias, como especie típica y diferencial de estos medios sometidos a la influencia aerohalina y dependiendo del tipo de duna, podemos hallar frecuentemente a la grama marítima (Agropyrom junceiforme) como especie colonizadora de arenas móviles, acompañada por el cardo marítimo (Eryngium maritimum) y algunas bulbosas como el nardo marítimo (Pancratium maritimun). En las dunas secundarias, semifijadas por la vegetación, domina el barrón (Ammophila arenaria subsp. arundinacea), gramínea de porte elevado y potente aparato radicular que ayuda a la inmovilización de las dunas, acompañada por la mielga marina (Medicago marina). Sobre las dunas terciarias o «muertas», a medida que nos alejamos de la orilla del mar y el suelo presenta una ligera capa de humus, aparece el dominio del sabinar, de elevada cobertura y acompañado de numerosas especies de matorral mediterráneo (Pistacia lentiscus, Myrtus communis, Rhamnus oleoides, Quercus coccifera, etc.). Este sabinar se ve enriquecido con especies características como la manzanilla mala o perpétua silvestre (Helichrysum stoechas), el mastuerzo marítimo (Lobularia maritima) o la lavanda de mar (Limonium sinuatum). En las etapas subseriales de degradación predomina la comunidad terofítica de Onodio variegatae-Linarietum pedunculatae, especialmente abundante en la Punta de El Saladillo, y la comunidad anual nitrófila de Sporobolo-Centaureetum sphaerocephalae. Además, respaldando estas dunas encontramos la subasociación psammófila-climatófila Myrto-Quercetum suberis halimietosum halimifolii.

Este alcornocal sólo lo hallamos respaldando el cordón dunar de la finca Matas Verdes, donde además se ve acompañado de quejigos y mezclado con diversas repoblaciones de pinos (Pinus pinea y Pinus pinaster) y ecucaliptos (Eucaliptus globulus). Presenta unas etapas de sustitución constituidas por jaguarzales y sabinares y el suelo se encuentra tapizado por diversas especies de musgos y líquenes de los renos (Cladonia stellaris).

La variedad y singularidad de los ecosistemas dunares de Estepona, hacen pues, de éste, un espacio de alto valor ecológico, con una considerable diversidad florística. No obstante, a pesar del elevado valor medioambiental que suponen estas dunas, sobre ellas recaen incesantes e importantes presiones urbanísticas y turísticas derivadas tanto de su situación en el corazón de la Costa del Sol, como por su ubicación en primera línea de playa. Estas presiones han mermado considerablemente uno de los pocos ecosistemas dunares que subsisten en el litoral mediterráneo andaluz y aún hoy los restos dunares de El Saladillo-Matas Verdes soportan graves amenazas que ponen en peligro su subsistencia, de ahí la urgencia de su conservación.

No hay comentarios:

Publicar un comentario